Y sí, aquí en Bs As encendés la TV en cualquier canal que informe y te encontrás con el "TERROR EN LAS CALLES (acompañese con sangre)" -Sí, las cosas suceden y la violencia idem - el mundo está podrido los jóvenes roban para drogarse, los rottweiler -que no son los del gran Bob- son asesinos, tenemos los gobiernos que nos merecemos BsAs es la París sudamericana (por favor..¿donde está Miller escribiendo en los bodegones o Céline puteando a todos sus compatriotas?) la educación está cada vez peor, demás etcéteras.
En definitiva símbolos del mismo miedo y pánico para todos los gustos; leáse sino el nuevo slogan: "CUIDADO CON LOS BICICHORROS", por cierto un aggiornado recurso, en el cual un fanático ciclista vería un complot para acabar con los molestos locos lindos en bicis que demoran a los señores apurados de la generación petrolero-dependiente.Puedo acaso yo o cualquiera seguir enumerando distintas hipótesis de la histeria colectiva por el consumo de violencia en estas líneas de este blog en todos los blogs en cada día de cada desgracia de una clase media a la que no le tiran una historia haitiana cualquiera por la cabeza y que-panza llena mediante- decide asustarse pues porque sino, ¿de que hablaría mañana ?
por aquí los Delironautas no estamos -levanto bandera- siguiendo los consejos de nuestro hemisferio derecho (deliro), sino consensuando las experiencias andadas aportadas por nuestro hemisferio izquierdo (nautas), aquel con el cual circulamos y vemos de todo: la bondades de los nocheros que saludan o ignoran al otro, al que circunda los buenos momentos de dos que caminan por Avenida Corrientes amándose en cada baldosa y donde también caemos sin sostén almohadillado sobre la calle y sus habitantes, los que duermen netamente sobre ella:
Debajo del edificio que habito lo tenemos a Raúl, tipo de unos 50 y pico de años que un buen día dejó todas las obligaciones que se le imponían, repartió lo que tenía entre su ex esposa y sus hijos (todos independientes según él) y se sacó el saco pesado que tenemos que llevar, sociedad que nos interpela y donde somos parte interpelando nosotros también claro, y pensionado ya, optó por la calle una bolsa de dormir y los pesos (pocos billetitos) de su jubilación para los víveres. El hombre fuma lee y se pega unos tragos: ¿está bien o está mal?....mmm, quién ha sacado el título de censor por ahí¿?.....y vos que leés ¿qué pensás?.
También tenemos a Omar, una punta de años-calculo 80 y largos- deambula frente a la plaza de los congresos, un rato en el edificio del servicio público (creo que es ese, un edificio como todos en definitiva) y por las noches al cine metropolitano. uno de los delironautas le alcanza los dos bolsos livianos que lleva, acercados a su vez por Jorge -amigo de las calles y del viejo Omar-. En un rato con él, lo escuchamos dedicar una veintena de piropos a misma cantidad de mujeres, ni un solo dardo con la virulenta procacidad de hoy, un viejo sí, pero un tipo de la calle. sobra decir que no recibió ni una sola mirada- solo una sonrisa- me alegré por él, aunque luego me dijo que esa excepción vino de la simpática paraguaya que trabaja de limpia en el cine y que incluso le había llevado comida más de una vez. Antes, mucho tiempo atrás, Esteban -21 o 22 años- nos pedía algo para comer pero no para él sino para sus hermanos e incluso nos ofrecía que compartamos lo comprado con ellos, ese involcurarse que muchos que conocemos y muchos más que no, hacen día tras día para que el que no tiene, tenga algo para el buche. y eso son sólo ejemplos de la noche o el día porteños en los barrios del sur del este y todos los demás también. ¿¡oh venerado miedo porqué no te has presentado ante estos ciclistas atolondrados!?, ¿porqué, si hemos recorrido muchos barrios en sus madrugadas y cruzado un montón de borrachos de distintos vicios?
Hay gente buena nota en Barracas o en Palermo, hay desbandes en el pituco Nuñez o en la Floresta más apueblada...sin embargo nos emperran y nos emperramos en creer que cualquier noticia es trágica: "¡se cortó la leche en la heladera de famoso fulano!" nos dicen desde los agarrapatas televisivos y los diarios mas desinformadores de la razón (y no, no hablo de política), y así, desde que lloramos ante las declamaciones mas duras dela vida, actuamos igual que cuando la escuchamos entonar a la vedette indiscutida del presente unas hirientes palabras a vaya saber quien ex amigo o algo; y entonces,
Todo esto camino al sur, ah sí, hablando de parque avellaneda, la seguimos luego
los noticieros intoxican la mente.
ResponderEliminarlos diarios pudren el alma!
la realidad esta en lo que vivimos cada dia, no en la tele!