lunes, 17 de agosto de 2015

A todos aquellos

Quiero escribirles a todos, que no me quede ni uno solo de los que me han ayudado en el camino, en las rutas y en mi vida. Transito un -nunca deseo que les pase-, palo de golpe y luego la càrcel, allì donde se abstrae de la vida ordinaria. ¿Cuàl es esta?, es nadar en la burocracia de esa vida, olas sin espumas, otra caja boba del sistema: a uno le quitan la libertad, ¿pero què quieren decir con esto?, aceptamos como sapos a la lluvia, que nuestra libertad sea restringida de formas varias, pues nadie es inmune al sistema, y en casi todos lados rige tal cosa.¿por què no hay opciones?, o si las hay, ¿por què no brillan ante nosotros con la debida magnificencia?, para què quede claro, refiero a magnificencia en el estado absoluto y elevado que requiere el respeto por este significado; por lo cual agradecemos no tirar al voleo esta palabra, un pedido a todos nosotros mismos.
Entonces la libertad no es tal, y estamos entendiendo y aceptando esto; muchos valientes luchan desde adentro, y a pesar de mis preguntas, andan y desandan por todos lados, continentes, pueblos y ciudades; todos ellos peregrinan portando la bondad del caminante, ese al que se le abren todas y diferentes puertas pues no hay dudas que su deseos, es que vayan sus pasos uno a uno con la tierra, girando como ella. imaginese una bola que torna con nosotros en ella sin movernos a su ritmo. 
¿Còmo vivir quietos muchachos? llevamos miles de años en la tierra, y tal vez solo un 10 % lo hemos vivido como sedentarios desde la apariciòn de la siembra, el otro 90% del tiempo arrastramos una genètica nòmada, podemos discutir esto pero no podemos negarlo; este es mi punto, sòlo la vida econòmica nos refrena el andar
¿cuàntas veces al viajar alguien nos dice:-uhh, como me gustarìa viajar!..pero...-
Entonces fuiste muchacho, es ahì donde no conjugamos memoria corporal con deseo de vida. Imagìnese un mundo donde todos nos movièramos, un campamento eterno de alternancias humanas, donde los paisajes sòlo serìan el decorado de nuestra verdadera historia: la pasiòn humana. 
¿Què es todo esto en nuestra agenda de rutina?. Polìtica, sexo, economìa, guerras,¿dònde hay una sino en todos lados, en cada esquina?, ¿quièn puede negar nunca haber insultado?
La vida deberìa ser contemplada desde otro sueño, y cuantos mas, mejor, pero en su defecto, que ironìa la palabra!, nos encontramos con todo esto, donde nosotros la mayorìa, no sè ustedes, con vidrio de por medio, escondièndonos tras infinitos y ricos vicios, como primera droga el consumo y contando en el siguiente orden blablabla, a cada cual la suya; y ahì nadamos, observando a los miles de profetas que se presentan cada dìa ante nosotros y no se piense necesariamente en humanos, ahì nomàs, en las afueras de las casas  donde conviven la huerta y el gato, la vereda y el perro, las calles con las palomas y las plantas con los mosquitos, los caracoles con la hojas, los cascarudos con el pasto, las arañas con los muebles o las vaquitas de San Antonio con las hamacas



                                   Las calles de pasto, de ahì a la huerta un paso

Por eso te digo, hay que moverse, cuando estàs preso solo pensas en andar y por eso en esta vida agradezco a todos los amigos, anònimos y familiares que me han ayudado y me ayudan, aceptando que uno se siente un poco ido cuando pende de un hilo en este mundo de leguleyos. 15 años llevo de eso, y tal vez sea de lo ùnico que realmente pueda decir algo con certeza; la costumbre de una cosa asì. 
En julio del 2008 naciò el primer Oniriciclo, y junto al gran Viajero obelisco, Juan Pablo Villarino, (puede leer:Vagabundeando en el eje del bien) croncretàbamos el vehìculo de nuestro deseo para recorrer la Amèrica hacia el norte, atravesàndola a bordo de estos hermosos dromedarios. Un año despuès se me prohibiò salir del paìs; asì, nunca pude empezar esta andanza que late en mi alma todavìa, luego de esperar 6 años por un acto de justicia de parte de este imperio llamado poder judicial. Estamos a merced de un sistema ùnico de vida, ante esto la variable es imposible, y es el poder judicial dueño y cancerbero de su llave mientras nosotros el pueblo sigamos eligiendo la siesta. Por mi parte sigo aportàndole sangre a mi vida, sabiendo que llegarà el dìa que alguien, instalado en el medio del poder, de un paso grande y nos absuelva definitivamente. Nunca me he negado a dar la cara por esta causa, historia central de mi vida, tambièn como suelo decir a cualquiera, puedo presentarme ante cualquier estrado, programa, entrevista, etc... A pesar de todos estos años no han doblegado mi espìritu y jamàs aceptarè la mentira y la condena, pues mi padre y yo fuimos, somos y seremos inocentes en el crimen de Ana Zerdàn.

Quien quiera brindarnos ayuda solo debe escribir a casozerdan@gmail.com o oniriciclos@gmail.com,

     ¡Pura Vida!