jueves, 26 de diciembre de 2013

122 años Henry Miller

Y pasó un año mas en que el molde fue roto.
Uno mas se sumó a la lista que dio el salto: Enrique Valentino Miller. Caminó despacio viniendo al mundo en Brooklyn, Nueva York, escupió hacia arriba siempre, sabiendo que el día siguiente es un perfecto desconocido a quien tal vez no llegara a conocer nunca. 
Nos cuenta:
                "Tiempo, tiempo... Muchas veces me he preguntado qué haríamos con el tiempo si de pronto tuviésemos el privilegio de funcionar a la perfección. Porque en cuanto pensamos en el funcionamiento perfecto, ya no podemos retener la imagen de la sociedad tal como está constituida en la actualidad. Gastamos la mayor parte de nuestra vida luchando contra desajustes de todo tipo; todo está fuera de sus carriles, desde el cuerpo humano hasta el cuerpo político. Suponiendo que el cuerpo humano funcione bien y que el cuerpo social también funcione bien, pregunto: "¿Qué haríamos con nuestro tiempo?" Para circunscribir por el momento el problema a un solo aspecto, la lectura, ruego al lector que imagine qué libros, qué tipo de libros, consideraría entonces necesarios o dignos de merecer un poco de tiempo. En cuanto estudiamos el problema de la lectura desde este punto de vista toda la literatura se desmorona. Según mi entender, en la actualidad leemos principalmente por los siguiente motivos: uno, para escapar de nosotros mismos; dos, para armarnos contra peligros reales o imaginarios; tres, para "mantenernos a la altura" de nuestros vecinos o para impresionarles, lo cual es lo mismo; cuatro, para saber lo que pasa en el mundo; cinco, para entretenernos, lo que significa ser estimulados a una actividad mayor y superior, y a una existencia más rica. Podríamos agregar otras razones, pero estas cinco me parecen las principales, y las he consignado por orden de importancia actual, según creo conocer a mis semejantes. No hace falta reflexionar mucho para llegar a la conclusión de que si fuésemos correctos con nosotros mismos y todo marchase bien en el mundo, la única razón válida, la que tiene menor importancia en el presente, sería la última. Las otras desaparecerían porque no tendrían razón de existir. E incluso la nombrada en último término, dadas las condiciones ideales mencionadas, tendría poco o ningún asidero en nosotros. Hay y siempre hubo individuos raros que ya no necesitan los libros, ni siquiera los libros "sagrados". Éstos son precisamente los iluminados, los que han despertado. Saben perfectamente bien lo que sucede en el mundo. No consideran la vida como un problema ni un calvario, sino como un privilegio y una bendición. No buscan imbuirse de conocimientos sino de sabiduría. No viven torturados por el miedo, la ansiedad, la ambición, la envidia, la codicia, el odio o la rivalidad. Se interesan profundamente pero al mismo tiempo se despreocupan. Gozan todo lo que hacen porque participan directamente. No tienen necesidad de leer libros sagrados ni de comportarse como santos porque ven la vida en su totalidad y ellos mismos son totales, de manera que para ellos todo es total y sagrado.

¿Cómo gastan su tiempo estos individuos excepcionales?

Ah, se han dado muchas respuestas a esta pregunta. Y el motivo por el cual existen muchas respuestas es que todo el que sea capaz de plantearse tal pregunta ante sí mismo, piensa en un tipo distinto de individuo "excepcional". Algunos consideran que estos raros individuos pasan su vida entregados a la oración y a la meditación; otros los ven actuando en el concierto de la vida, desempeñando un sinnúmero de ocupaciones, pero sin hacerse notar nunca. Sin embargo, no importa cómo contemplemos a estas almas raras, no importa el mucho o poco desacuerdo que haya en cuanto a la validez o la eficacia de su manera de vivir, estos hombres tienen en común una cualidad, cualidad que los distingue radicalmente del resto de la humanidad y proporciona la clave de su personalidad, su raison dêtre: ¡tienen todo el tiempo en sus propias manos! Estos hombres jamás están demasiado apurados, jamás demasiado ocupados como para no responder a una llamada. El problema del tiempo sencillamente no existe para ellos. Viven el momento y tienen noción de que cada momento es una eternidad. Todos los demás tipos de individuos que conocemos establecen límites a su tiempo "libre". Los primeros, en cambio, no tienen otra cosa que tiempo libre.



Acerca de esta noción de perder tiempo, ganar tiempo,
ahorrar tiempo, etc....:"No obstante, y a pesar de la llegada del milenio, los seres humanos todavía estarán obligados a reparar en el "water closet" diariamente. Todavía tropezarán con el problema de cómo sentarse en el excusado para aprovechar mejor el tiempo. Este problema es virtualmente un problema metafísico. Para desempeñar esta función la naturaleza no nos pide otra cosa que completa conformidad. La única colaboración que demanda de nuestra parte es nuestra disposición a dejar salir. Evidentemente, cuando el Creador diseñó el organismo humano comprendió que sería mejor para nosotros dejar libradas ciertas funciones a sí mismas; es evidente que si funciones tan vitales como la respiración, el sueño o la defecación quedasen libradas a nuestra disposición, algunos dejaríamos de respirar, de dormir o de concurrir al baño. Muchas personas, recordemos que no todos están en el manicomio, ponen en tela de juicio la inteligencia de su propio organismo. Preguntan por qué, no para saber sino para ridiculizar lo que su limitada inteligencia no alcanza a comprender. Contemplan las demandas del cuerpo como tiempo desperdiciado. ¿Cómo pasan, entonces, el tiempo esos seres superiores? ¿Están completamente al servicio de la humanidad? ¿No comprenden la razón de que haya que perder tiempo en comer, beber, dormir y defecar porque tienen tantas obras buenas que hacer? Sería interesante saber lo que quiere decir esta gente cuando habla de "perder el tiempo".

Pura Vida Henry Miller!

martes, 3 de diciembre de 2013

La culpa la tiene el Chivo

Hoy reproducimos esta nota publicada un año atrás pues aún sigo siendo el Chivo expiatorio de esta mentira argentina



                                ¡Puras Gracias y eternas Vidas amigos!

-Wilson de la Gente Mariale.O.Luna-Romina Pofcher-Perro Malo-Camille Bouziat-Bicis por Sonrisas-Mauro Torres Ph-Gustavo.j.Rodriguez-German Laserre-Flox Antonini-Natalia Palumbo-Martìn Malamud-Flor Funez-Carlos Di Bartolo Martìnez-Adriàn Maderna-Marita Salazar-El Chapu-El Chiky Amorebieta-Yo soy Otro Tù-Alejandro Delcerro-Cahuita-Giancarlo Leòn-Geneve Albanesi-Diego Maciel-Ana Jurado-Lionel Demayo-Diego Lòpez-Fa Ra-Sole Ferraras-Guido- Grisleda Lancman-Silvia Yelin-Marita Salazar-Sebastiàn Miloc-Juanca Romero--ManPorro-Cecilia Jari-Dean- Estefi Comùn-Stella Canella-Hoy Miller-Antoine-Matìas Lavorato-Matìas adriàn Reynoso-Blaise-Amanda Lòpez-Melani Lorenzo-Juliàn Giglio-Gonza Villaroel-Fantasma Urbano-Francisco Amador-Ayi Aime Alvarez Coll-El Otro-Marìa Mara Robles Castillo-Manù Moschen-Mae-Melani Lorenzo-Diego Lòpez-Lucas "Thoreau" Salvitelli-Rec acciòn-Damian Zen-Patricia Rodrìguez.
Y todos los maseros que andando, cambiaran algo.

De los amigos, Todos: este chivo ha retomado lucha ante tanta ayuda brindada; en la invitaciòn virtual a esta defensa a pedal tuve respuestas como:"Me sumo!-Cuenta conmigo!-contas conmigo, obvio!!! que asi sea! te banco a morir hermano-sabelo juan ma.. que voy a estar para darte mi apoyo!!! pura vida hermano." 
No habrà instancia legal ni recurso de federal de cuerno que impida que abrace la intenciòn de todos estos bicicletistas que deciden ayudar, porque la bici es alta o porque tanto hemos andado, la compañìa y el espacio nos hace fuertes a los ciclistas andariegos, y asì los espacios dentro y fuera de MC se multiplican.
                  Gracias totales y eternas; recordarè alguna vez que este chivo iniciò su caminata en un dìa de sol con miles de bicicletas pedaleando bajo el agua de los vecinos generosos y divertidos de ver pasar tanta felicidad gratuita.


                                                      "El Chivo" foto Diego Maciel
               

                                     "La Justicia" foto: Damian Zen


                                                  "El Policìa" foto: Diego Maciel

4 años de espera dentro de un alto sueño no pudieron con la realidad sin fantasìas; y es que atravesar un continente conquistado encaramado en un oniriciclo es demasiado tentador para los etiquetadores del todo
Entre julio y septiembre del 2008, soñamos junto a Juan Pablo Villarino una romàntica idea andando sobre estos bellos dromedarios a pedal. En julio del 2009 la justicia rionegrina me negó la salida del paìs y a cambio me regalaron una firma semanal en el juzgado de turno como conjuro de fàbula burocràtica. Semanas despuès Juan Pablo abandonò el proyecto y volviò al viaje, ¿pues como mantenerse nòmada en un paìs sedentario? Desde entonces solo soñè dormido, alentando el viaje en radios, masas crìticas, TV, webs. Presentè al Oniriciclo en calles perdidas y tambièn bajo esa espada de Dámocles que llamamos obelisco. 
A contramano de arbitrarias decisiones me impuse una deliciosa ceguera: abrazarme a este no-viaje intentando la muerte del no, puta negaciòn que por estas latitudes se impone sobre los buenos dìas.
Las diferentes perspectivas que el caso Ana Zerdàn fue imponiéndome trashumaron mis fantasìas sin poder movilizarme y con el cuerpo sudando en la geografìa.
Trajino un viaje interno lleno de tristeza andante y revès de sonambulismo estatizado.
Bien eso somos los chivos expiatorios: expiamos culpas, mientras jueces y abogados cumplen el horario laboral de flagelo gratuito a la que todo procesado, con y sin càrcel, debe aprender a reconocer.
Asì pasaron el 2010-2011, y la espera de esta larga espera se dio el gusto, y quemò mas almanaques
2012 me dio de lleno al plexo, la convivenvia de mi contradicciòn de vida extraintracarcelaria con la imposiciòn de religiosa ilegalidad. 
"Nadie puede ser juzgado dos veces por la misma causa", un artìculo que muchos conocen de memoria como un mantra protector, incluido en mas de 180 Constituciones Nacionales, No alcanzò; y entonces todo se va volviendo mas dìficil que ganarle a Barcelona, una pelea desigual y con la deriva por posibilidad. 
                         "el Expiatorio asciende" foto: Diego Maciel


Rolar.
         Buenas tardes, soy "El Chivo". La justicia y la policìa se han vuelto mis caminos rodados en los ùltimos 14 años; mi hoy es ser este chivo liberto con fronteras definidas que simbolizan la novela jurìdica -sin rating- que me sostiene como actor protagònico. 
Invitè a Wilson y Mariale, esos habitantes de la expresiòn, a jugar en Masa Crìtica BsAs. Como chivo amo este rolar masero, masivo o no, que nos lleva a crear rutas citadinas, amo esos tapones elegidos de solidario andar. Abro la puerta de la jaula expiatoria en cada masa andada a mi libertad de ideas..."La culpa la tiene el Chivo" invita a abrir el juego a la metamasa, esa visiòn intraexterna de las cosas que uno vive. Asì los personajes, los cocineros, asì mountain o playera, fixie, inglesa o de paseo, cada enfoque del masero es propio pensamiento de uno y a su vez, visiòn de otro. 
¡Salud Masa Crìtica nùmero 50!




Oniriciclos. Foto Mauro Torres Ph